Blog de reflexiones de una escritorzuela ansiosa de compartir su peculiar y deforme visión del mundo, a través de su novela en ciernes.
jueves, 30 de diciembre de 2010
Reflexión.
lunes, 27 de diciembre de 2010
Navidad
martes, 21 de diciembre de 2010
Esto promete.
viernes, 17 de diciembre de 2010
Un pequeño aporte.
"Cuando me pidió que corrigiera sus páginas no pensé en ello como un trabajo, sino en el sueño de todo lector. En serio, ¿quién no ha leído algo y ha querido decirle cuatro cosas a autor? Ojo, no quiero decir con eso que fueran cosas negativas, no nos confundamos.
Pero cuando empecé con la tarea, me di cuenta de que sí que era un trabajo, y además mucho más difícil de lo que parecía en un principio: sustituir nombres, comas, mayúsculas, ponerte en la piel de los personajes, saber si reaccionarían así o no...
Pero todo ello vale la pena cuando se llega a la mejor parte: la de poder comentar lo que lees; un “esto me ha gustado” o “creo que has querido decir esto, pero quizá vendría mejor así”.
Cuando leo el texto terminado (entiéndase por terminado, tras pasar por mi corrección y su aprobación) me siento bien, no solo porque me guste lo que leo, sino porque me siento parte de la obra. En realidad, no he hecho más que criticar, pero una crítica constructiva al fin y al cabo. Y sobre todo, siento que aporto mi granito de arena para que la novela evolucione a algo más serio que un documento de texto en un ordenador (Y en discos duros externos. Y en un pen. Y en un servidor. Y en...) Si algún proyecto se lo merece, es este.
Si el éxito surge como resultado de mezclar esfuerzo, perseverancia y mucho trabajo, pronto estaremos ante uno garantizado. Ahora, solo nos queda esperar.
Saida Herrero Morales"
miércoles, 15 de diciembre de 2010
Poco a poco
viernes, 3 de diciembre de 2010
Nostalgia por lo que ha dejado de ser.
domingo, 28 de noviembre de 2010
Cortar por lo sano.
viernes, 26 de noviembre de 2010
Asentando bases
jueves, 25 de noviembre de 2010
Rowling y Rosillo empiezan por "R"
miércoles, 24 de noviembre de 2010
Una discusión trascendente.
martes, 23 de noviembre de 2010
Ya no me importa.
martes, 16 de noviembre de 2010
Ya tiene título.
viernes, 24 de septiembre de 2010
Stand by...
"El lobo se sentó en la cama y tomó la piedra de afilar la espada. Al desenvainarla, trató de quitar con un trozo de tela la sangre seca, pero no salía fácilmente. Tim se acercó y lo ayudó. Lentamente, y pasados unos minutos, Teil comenzó a hablar.
-Nadie sabe nada de mí Tim, excepto tú. Si me pasa algo a mí, tú te quedarás con este lugar. No hay nadie más que lo reclame, ¿lo has entendido Timothy?
El niño asintió, sintiéndose sobrecogido por lo que acababa de entrever. Con Teil siempre se trataba de leer entre lineas y a Tim se le daba muy bien. Lo que acababa de leer lo conmovió: Teilnok estaba solo, y él era el único en quien confiaba en toda la ciudad. Le acababa de ofrecer esa casa y Tim sabía lo que había dentro: mucho, mucho, mucho dinero.
-Pero los demás...
-Todos están corruptos. Y tú eres inteligente, más que ellos. Es la única muestra de fidelidad que puedo darte, porque no sé dar otra. - Por último, y con gran esfuerzo añadió- Lo siento.
-Tú nunca pides disculpas.
-A ti sí. - Le revolvió el pelo rubio otra vez. Tim ya estaba sonriendo.
No le importó tener las manos llenas de sangre seca y pegajosa, Tim se sintió muy feliz, y siguió limpiando el arma con tranquilidad, pensando lo que diría su madre si le viera. Si Teil era incondicional con él... ¿Porqué no iba a serlo Tim?"
viernes, 17 de septiembre de 2010
Otra pieza
He observado que lo que más os gusta son los breves fragmentos que os entrego... Aquí va este. Es jugosamente reciente, os lo puedo asegurar.
"Un crujido cercano puso en guardia al lobo, que se pegó a una pared en penumbra. Vio girar unos metros más allá a dos miñones, que buscaban a alguien sin duda. Y Teilnok creía adivinar a quien.
-¿Teilnok? ¡Sal! ¡Te llama la ley!
Lo habían visto, seguramente avisados por Moali. No tenía sentido esconderse.
-¿Y como sabe la ley mi nombre? -Anduvo hasta el centro del camino de tierra, rodeado de escombros y ratas. Al quitarse el sombrero, su pelo semilargo y oscuro le enmarcó la mirada atenta. Los guardias no parecían asustados en absoluto, y eso hizo pensar a Teil que quizá no estaban solos, porque no eran lo suficientemente fuertes como para estar tan relajados.
-¡Tu fama te precede! -dijo el miñón rubio, que era joven. Se pararon a escasos metros de Teil, quien bajo el abrigo ya aferraba su cuchillo.
-Llevamos un tiempo buscándote, y pensamos que alguien como tú... Bueno, rondaría por la zona... [...]
-El caso es que en los tiempos que corren... Verás Teilnok.- El miñón dió confiado unos pasos hacia adelante. Teilnok respondió al movimiento interponiendo un cuchillo entre ambos. La sonrisa del adolescente desapareció, colocó las manos indicando a Teil que se calmase, y dio un paso más.
Fue lo último que hizo antes de notar el cuchillo de Teil ceñirse peligrosamente a su cuello. El tal Trab, soltó un ridículo gritito. Teilnok susurró al oído del joven.
-Mi nombre no se va diciendo por ahí... ¿Lo has comprendido? ¡No se pregunta por mí!
El joven no podía mover la cabeza, pero Teil supo que lo había comprendido por el temblor que se había adueñado de él.
-No le hagas nada, ¿vale? Hay que tranquilizarse. No pasa nada. -Decía Trab a trompicones, retrocediendo unos pasos.
“Las joyas de la Reina” Pensó Teilnok asombrado por la cobardía de los miñones.
-Te lo voy a preguntar una vez. ¿Porqué me buscáis?"
jueves, 9 de septiembre de 2010
Objetivos erróneos.
viernes, 20 de agosto de 2010
No conozco a Teilnok.
" Casi podía escuchar como zumbaba la cabeza de Tim, en la que parecían agolparse las preguntas a modo de ligero temblor. Sumiso y consciente de lo poco que le gustaban los interrogatorios a Teil, el niño solo hizo una pregunta que no pudo resolver mirando el adusto semblante del lobo.
-¿La quieres?
Tras una mirada al suelo, y después otra mucho más arriba respondió.
-Yo creo que no sé hacer eso Tim. "
miércoles, 18 de agosto de 2010
Espacio nuevo, capítulo nuevo.
lunes, 5 de julio de 2010
Con respecto a la entrada anterior...
Por fin he salido del atolladero en que me encontraba. Hablo de mi última entrada, y de mis problemas con mi novelucha. Sin duda no esperaba que fuera fácil hacer las cosas bien, sin embargo daba por hecho que sabría el procedimiento para empezar a hacerlas, y obvio es que me equivocaba. No conozco los procedimientos a seguir, ni tampoco cuales son los problemas comunes de un escritor a la hora de escribir un libro tan complicado como el que me traigo entre manos, porque -por suerte o por desgracia- no cuento con un círculo cercano de gente locuela que comparta conmigo esta más que dura afición.
Daniel, mi colega en la distancia y silencioso lector y secreto seguidor de este blog, puso en mi conocimiento a los llamados "correctores" que constituyen a dia de hoy la salvación de cualquier escritor que se precie. Ellos se encargan de desgarrar un entramado que el escritor ha formado y sacan todos los defectos e imperfecciones habidos y por haber. Critican tu obra, y además les pagan por ello. Todo un chollo.
No les pagan mal, puedo jurarlo. Habiéndome ya informado de que sus tarifas llegan al "precio por palabra", decidí que -si bien necesitaba un corrector para obtener una visión más objetiva de mi novela- no podía pagarlo. Y pensé... ¿Qué es un corrector? En realidad es solo un lector crítico. Yo conozco a una muy buena lectora, es inteligente y confío en su criterio. Además de ser legalmente mi representante, conoce bien mi estilo y hasta donde sé, se siente cómoda con él. Otra ventaja de ella es que al no gustarle el género de la novela que me quema los dedos, no tiene referencias de otros escritores que contamine su mente porque, sinceramente, no ha leído ninguna.
De modo que ahí la tengo, mejor amiga, mejor representante y mejor correctora (a falta de referencias anteriores, XD) Su trabajo hasta el momento ha sido brillante y me ha dado fuerza para releer los pasajes más flojos de mi novela y re-escribirlos.
Para finalizar, y comunicándoos que los capítulos ya abrasan como el verano, compartiré con vosotros una frase descriptiva-comparativa de la que me siento particularmente orgullosa. Espero que la disfrutéis y que algún día podáis leerle en su contexto correcto.
""Su pelo negro, lleno de bucles y elevado un palmo y medio por encima de su cabeza la hacía parecer mucho más alta de lo que en un principio era. Sonrió con la mirada llena de algo que se parecía demasiado al odio, y alzó los brazos.
-¡Pueblo! ¡Vanhos! ¡Alzad la cabeza! ¡Mirad al cielo!
Hasta Teilnok lo hizo. Pasaron muchos segundos. El asesino fue uno de los primeros en bajar la cabeza y observó en todo su esplendor el efecto que producía aquella mujer en los Vanhos. La observó: su soberbia era tan larga como la cola de su vestido, y tan rígida como su corsé, tan cruel como su mirada y tan segura como su porte. Teilnok odiaba la soberbia, y advirtió que por ende odiaba a esa mujer.""
miércoles, 14 de abril de 2010
Suma y sigue, o resta.
He escrito un capitulo unas 4 veces. Completo. Desde el inicio hasta el final.
En él, todo el pueblo ha de escuchar como el personaje más temido de toda la novela convence y manipula al pueblo para que actúe en beneficio de ella misma. Ella aterroriza en realidad. Pero nunca lo suficiente.
Es un pasaje muy importante que no debe ser mal escrito. Es la primera vez en toda la novela en que ella aparece y ni siquiera hago justicia a la descripción de la susodicha. Estoy atascada en un interminable pasaje que no sé como solucionar.
Escribir un libro es fácil. Pero escribir un libro con sentido y con conocimiento de causa y consecuencialidad... eso ya es harina de otro costal. No quiero escribir por escribir, releer y conformarme. Quiero escribir sabiendo lo que escribo, releer y sorprenderme.
Quizá una de las ventajas de tener tan clara la estructura de la novela y sus personajes, es que ahora puedo decidir no escribir ese capítulo y continuar en el siguiente. Pero temo perder el hilo y empezar a escribir contradicciones, difíciles de detectar y más aún de corregir. Tengo un brillante argumento parado por ese tipo de contradicciones. No puedo corregirlo, ni tampoco retomarlo porque no sé a donde puede llegar. Aquella novela murió, y no pienso permitir que eso le pase a Teilnok y a Tim. Son demasiado importantes para mí.
¿Qué debo hacer?